Me encontré hace días un foro en donde un usuario se refería a los campesinos como atrasados e ignorantes. Esa frase me hizo pensar en mis abuelos y en aquel bambuco de Fausto que dice “anoche estuve soñando y hablaba con mis abuelos y les pregunté llorando qué puedo hacer por mi pueblo“. Este artículo se lo dedico a ellos, a mis abuelos y a todos los campesinos de Colombia y de Latinoamérica.
De la Colombia rural a la Colombia urbana
Foto de Mauricio Laya: un muchacho campesino santandereano.
Anuncios